Poder y corazón

Residencial Ecomaskulino 7-9 de Junio

Piedralaves(Ávila)

Los invencibles no son los que vencen en todas las batallas, sino los que se levantan una y otra vez después de las derrotas.

Quien no ha sido derrotado más de una vez no puede levantarse y a quien no se le ha dado la oportunidad de levantarse al menos una vez no puede conocer el peso de su fuerza.

Todos los varones guardamos memoria de situaciones en que hemos quedado a merced de otros más fuertes; a veces somos nosotros los que hemos encontrado alguien más débil en quien ejercer nuestra dominación: hombre o mujer. Ha llegado el momento de recuperar nuestra auténtica fuerza, que no es la física ni la del discurso de la razón y la lógica, ni la del silencio amurallado ni la invulnerabilidad fingida. Ha llegado la hora de recuperar el cetro del verdadero poder. El poder del corazón que comparte sin competir, crea sin destruir, genera vida sin manipular ni hacer cálculos. Que se enfrenta a los conflictos sin evitarlos ni aumentarlos, porque está abierto permanentemente a los cambios de la vida.

Todo esto no son simples deseos. Es una realidad velada por las condiciones de vida en la ciudad, el aislamiento, el sometimiento a la mentalidad patriarcal en el trabajo, la familia, los hábitos de consumo y ocio.

La convivencia en un espacio de seguridad y confianza, el compartir dolores, fracasos y éxitos, la danza, las tareas en equipo, el contacto físico, las tertulias con humor, las marchas y el ocio en la naturaleza, los espacios de silencio y reflexión, las propuestas terapéuticas –es decir, sanadoras-, nos guían en el despliegue y el reconocimiento de estos surcos arquetípicos de dolor, miedo, acciones y reacciones y en el encuentro del  corazón, la única fuerza capaz de contenernos sin debilitarnos ni reprimirnos.

Esta convivencia-encuentro que cierra el curso 2012-2013 y anuncia la nueva etapa tiene como hilo conductor recuperar el PODER DEL CORAZÓN a través del reconocimiento y expresión de sus emociones básicas: el miedo, la tristeza, la rabia, el orgullo, el amor y la alegría. Emociones todas ellas positivas y necesarias cuando están conectadas con sus causas correspondientes y son expresadas en el momento y en la intensidad adecuadas.

 NOTA: En el post anterior puedes encontrar  algunos detalles para participar en este taller.